THE VELOCIPASTOR

Año: 2018

Si de dinosaurios hablamos, hay que convenir que el velociraptor se convirtió desde Jurassic Park en uno de los más famosos y rentables personajes en la historia del cine. Pero esta película va mucho más allá. Como en La Mosca o El Hombre Lobo, explora los posibles resultados de una mezcla entre animal y humano, con el agregado de un argumento muy particular.

Desde el principio el espectador es abofeteado por lo extraño: el cura protagonista termina su misa y ve desde la puerta de la iglesia a los padres que lo esperan, seguramente para ir a almorzar y compartir un rato en familia. Pero de la nada el auto de ellos explota y vuelan por los aires. Una escena impactante si no fuera porque nunca hubo presupuesto para la producción de dicha explosión y se la reemplaza por un mero texto aclaratorio. Algún desprevenido podría llegar a pensar en un error puntual de la versión de la peli que está mirando, pero el ojo entrenado ya sospechará que se está frente a lo que tranquilamente puede haber surgido como una joda entre amigos: una película que nace después de una noche de cervezas (varias cervezas) como una propuesta para romper un rato las guindas. Amigos como cualquiera de nosotros, sin mucha experiencia en actuación o producción. Y sin dinero.

La cuestión es que tras el trágico atentado el cura comienza a cuestionar su fe y viaja a China para encontrarse a sí mismo (uno sabe que es China porque hay un nuevo cartel que así lo indica, sino imposible determinarlo ya que lo único que oficia como escenario es un bosque). Durante su viaje místico entre los árboles el religioso se topa con una mujer que viene huyendo de un ninja, quien finalmente le da alcance y le asesta un flechazo mortal en el pecho. Moribunda, ésta llega a darle un diente de dinosaurio para que ponga a salvo de los malhechores. El cura lo toma pero se termina cortando la mano. Esto producirá el efecto de metamorfosis tan temido durante las jornadas posteriores, en momentos en que nuestro héroe caiga presa del estrés, como el Increíble Hulk. Aunque acá el monstruo verde es reemplazado por un traje de dinosaurio tan simple como el más barato que cualquiera de nosotros podría hallar para alquilar en una tienda de disfraces.

Cabe aclarar que al dino completo no se lo ve hasta la apoteótica pelea del final.

Acá les dejamos un resumen magistral con las mejores escenas, aunque recomendamos al lector verla completa porque no tiene desperdicio:

A pesar de que la producción parecería ser algo imposible de hallar fuera de Youtube, créase o no esta joya está disponible en Amazon Prime Video (no sabemos si fue un experimento entre los responsables de la plataforma para ver si algún suscriptor se animaba a mirarla o si Jeff Bezos es amigo de los que hicieron la peli y bajó la orden de incluirla en el menú para devolverles algún favor).