BAD TASTE
Año: 1987
Ningún conocedor de cine puede negar el nombre de Peter Jackson. En el currículum de este gran director y guionista neozelandés se destacan obras maestras como las trilogías de El Señor de los Anillos y su precuela, El Hobbit. También la remake de King Kong de 2005. Pero mas de uno se sorprenderá al notar que sus inicios se dieron explorando lo más crudo del gore: esas producciones de terror visceral y violencia extrema que dejan a uno dado vuelta del asco y del miedo.
Se podría decir que acá estamos frente a un mix perfecto entre una película clásica y una bizarra. Efectos especiales y escenas bastante burdas por un lado, una trama poco elaborada por el otro. Pero a pesar de todo, Mal Gusto se convirtió en una obra de culto, vaya a saber uno por qué...
La historia gira en torno a la lucha que encaran Ozzy, Barry, Frank y Dereck (el grupo gubernamental del Servicio de Investigación y Defensa Astral) contra una horda de extraterrestres en un pueblo inhóspito. Allí descubrirán que todos sus habitantes han sido descuartizados por el grupo de alienígenas, quienes pretenden llevar la carne a su planeta para establecer un nuevo menú de hamburguesas para una cadena de comidas rápidas.
Pero ¿por qué hablamos de gore y no de terror tradicional? Acá algunos ejemplos de esas escenas que convierten al film en lo que es:
- Tras un fuerte golpe se abre la cabeza Derek descubre que se abre el cráneo y se le ha salido una parte del cerebro. No tiene mejor idea que tomarlo con la mano del suelo y volvérselo a colocar, valiéndose para sujetar la herida de un sombrero y luego de un cinturón.
- Otro de los protagonistas infiltrado entre los aliens, para no despertar sospechas debe participar de la ceremonia grupal de bebida del vómito turquesa regurgitado por uno de los enemigos. Y lo peor es que le termina gustando...
- En el final Derek, dentro la nave espacial que llevaba al líder a su planeta, lo sorprende desde el piso superior y lo abre al medio de cabeza a los pies con una sierra eléctrica. Termina saliendo entre sus piernas, embarrado de vísceras pero feliz, declarando a las cámaras triunfante que se siente como que "ha vuelto a nacer" (justamente por la forma y el lugar del que salió...)
En síntesis: una experiencia recomendable si te gusta Jackson, para conocer sus peculiares primeros pasos. También para los amantes del terror, lo clásico y repulsivo. Y para quienes necesiten purgarse a través de un buen vómito.